Sirva como muestra de la
voracidad ofensiva de Marc Gasol que, hasta esta temporada, sólo había
alcanzado los 30 puntos en una ocasión desde que aterrizara en la NBA en 2008.
En 14 encuentros del presente curso, el pívot español ya ha llegado tres veces a
la treintena. La última, frente a los Clippers. Jamás en su carrera en la Liga
había enlazado dos partidos consecutivos de 30 o más puntos.
Marc está ejerciendo de
líder del líder. Los Grizzlies se mantienen en todo lo alto de la NBA y el
pívot es el principal responsable.

El técnico también dio crédito a Memphis
que, lejos de ser una sorpresa, se confirma como el equipo más conjuntado de la
NBA. Ahora que ha recuperado a todos sus efectivos tras sufrir un virus,
también es uno de los más completos.
Marc, en su último año de contrato, está
dispuesto a reventar el mercado el próximo verano. Ser uno de los mejores
pívots de la NBA merece una recompensa. En este comienzo de temporada, sus
estadísticas no desmerecen las de ningún otro interior de la competición,
aunque nadie llega a las de Anthony Davis. En los enfrentamientos particulares,
el español no ha salido mal parado ni con él, ni con Dwight Howard, ni con
DeMarcus Cousins, otros colosos del Oeste y de la Liga.
El último en padecer los zarpazos de Marc
fue DeAndre Jordan, que se quedó ayer en dos míseros puntos. El jefe de los
Grizzlies es ahora terrorífico en ataque, pero nunca dejó de serlo en defensa.
Por eso es uno de los mejores de la NBA.
El cambio en el juego de Marc es
evidente. Se muestra más agresivo que nunca en su carrera en la NBA. Además,
está haciendo caso a las muchas voces que decían que debía ser más egoísta y
asumir más responsabilidad en ataque, no sólo en la creación gracias a su gran
lectura del juego. El pívot español ha dejado de lado algo de generosidad —asiste
menos que en las dos últimas temporadas (3,1)— para volcarse más en el ataque:
tira (14,3 lanzamientos) y anota (19,9 puntos, 5,3 más que en su mejor
temporada y es el vigésimo en la clasificación de anotadores de la NBA) más que
nunca en su carrera, fuerza muchas más faltas y va al tiro libre con más
frecuencia. Es el quinto jugador de la Liga que más veces ha ido a la línea
(94).
Sirva como muestra de la voracidad ofensiva de Marc Gasol
que, hasta esta temporada, sólo había alcanzado los 30 puntos en una
ocasión desde que aterrizara en la NBA en 2008. En 14 encuentros del
presente curso, el pívot español ya ha llegado tres veces a la treintena. La última, frente a los Clippers. Jamás en su carrera en la Liga había enlazado dos partidos consecutivos de 30 o más puntos.
Marc está ejerciendo de líder del líder. Los Grizzlies se mantienen en todo lo alto de la NBA y el pívot es el principal responsable. "No tenía ninguna duda de que Marc sería agresivo. Visto nuestro balance de 12-2, le vamos a decir que meta 30 puntos todas las noches", bromeaba el base Mike Conley, uno de sus mejores cómplices en el vestuario.
Marc está ejerciendo de líder del líder. Los Grizzlies se mantienen en todo lo alto de la NBA y el pívot es el principal responsable. "No tenía ninguna duda de que Marc sería agresivo. Visto nuestro balance de 12-2, le vamos a decir que meta 30 puntos todas las noches", bromeaba el base Mike Conley, uno de sus mejores cómplices en el vestuario.